LUNES 23-11-2020. Sin ti nada puedo.
Sin Ti Nada Puedo
Buenos días, Cristo Reina, nos vamos preparando para la oración,
Buenos días, CRISTO REINA, nos ponemos en presencia del Señor, en el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo, AMÉN
Bienvenido a la oración de la mañana del lunes. Venimos de días muy especiales para la Familia Cristo Rey, donde hemos estado festejando la grandeza de Dios y todo lo bueno que ha hecho por nosotros. En este Noviembre de Pandemia, la situación sanitaria que estamos viviendo nos hecho vivir una Semana de Cristo Rey diferente, pero aún en estas circunstancias, no hemos dejado de vivirla intensamente y con MÁS CORAZÓN que nunca 💙.
La grave situación que atraviesa el mundo nos ha impedido realizar encuentros y actos multitudinarios, como en años anteriores, por lo que ayer no pudimos estar todos juntos en la Capilla del Cole en la Misa que celebra la Solemnidad de Jesucristo, Rey del Universo, y que supone el principio y fin del año litúrgico. En el evangelio que pudimos escuchar ayer, Jesús nos decía que el Señor vive en el prójimo, que en el modo en el que tratamos a quienes están cerca, le trataremos así a él, por eso Él te pide que trates a las personas que tienes cerca como si de él mismo se tratase, que las ayudemos, y en la medida de nuestras posibilidades atendamos a sus necesidades más acuciantes.
Es en esos momentos, el mismo Jesús es el que nos convoca, el que nos cita, el que nos conoce, el que nos llama por nuestro nombre, para que llevemos a la práctica nuestro lema, nuestro distintivo, nuestro saludo conjugado en tiempo presente, dos palabras que son a un mismo tiempo anuncio, procesión de FÉ y compromiso de vida. CRISTO REINA.
Este es el lema que nos hace sentirnos más cerca, más en comunidad como el Padre Gras pretendió durante toda su vida. Es por ello también que queremos que sigan resonando en nuestro interior sus palabras: “Habla, Señor, al corazón que ansía tu palabra, …”.
Comprometámonos todos a estar atentos a los demás, a sus sentimientos y emociones, para ello debemos despojar nuestro interior de envidia, de ego, de superficialidad, de mediocridad, de indiferencia para vivir con más corazón nuestra vida. Para que esos deseos de iluminar, de hacer bien a los que nos rodean para que el amor de Cristo reine en nuestros corazones vamos a rezar todos juntos un padre nuestro:
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén
Feliz lunes, y que tengáis una buena semana.
Cristo Vence, Cristo Reina, Cristo Impera, Cristo Luz Infinita, alumbre nuestra inteligencia, AMÉN.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, AMÉN.
