Saborea el momento

 Saborea cada momento

Buenos días, Cristo Reina, nos vamos preparando para la oración,

Buenos días, CRISTO REINA, nos ponemos en presencia del Señor, en el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo, AMÉN

Bienvenidos a la oración de la mañana de este martes, respiremos hondo, dejemos que llegue el aire a nuestros pulmones y abramos nuestro corazón a Dios, dedicándole estos primeros minutos de la mañana. Haz silencio en tu interior y escucha... Por unos momentos desconectamos de nuestros ruidos...escuchamos en el silencio, los latidos de nuestro corazón, sentimos a Dios que nos espera.

Seguimos con la semana y tenemos la oportunidad de vivir un nuevo día. No dejes que la rutina no te permita saborear cada uno de los momentos de tu vida. Es una idea importante para aprovechar, todos los momentos que se presentan en nuestra vida cristiana. Al final, lo que se saborea intensamente, es lo que queda para siempre.

Piensa por un instante algún momento que hayas saboreado durante este curso…seguro que muchos de ellos han implicado hacer el bien o has disfrutado haciendo el bien con o para los demás. Los cristianos tenemos que ser la gente que descubre siempre el bien que hay en cada acción individualmente o con los demás. Somos los que descubrimos el bien y constructores del Reino.

Así nos lo enseña el evangelio en Mt 25.

“Venid vosotros, benditos de mi Padre; heredad el reino preparado para vosotros desde la creación del mundo.”

Es el momento de seguir saboreando cada momento, es el momento de que escuchemos el latido del corazón de todos y de todo lo creado, para ayudarnos a encontrar en su belleza al Señor de todas las cosas y volver a él. Estamos llamados a ser instrumentos de Dios Padre para que nuestro Reino sea lo que Él soñó al crearlo y responda a su proyecto de paz, belleza y plenitud. El padre Gras ya nos los decía, “Nada hay que tenga al hombre tan dichoso en la Tierra como la práctica del Bien”.

Recemos todos juntos un Ave María, para que María, la madre que protegió a Jesús, también nos cuide, nos proteja y nos ayude a seguir saboreando cada paso del camino, así como la compañía que está a nuestro lado, porque ahora es el mejor momento para seguir construyendo el Reino en cada uno de nosotros.

Dios te salve María, llena eres de gracia, el Señor está contigo. Bendita eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

No lo olvides el mejor momento es el presente!! Y no hay nada más bonito que la buena gente!!

Feliz martes, es la hora de seguir viviendo con la semana con intensidad.

Cristo Vence, Cristo Reina, Cristo Impera, Cristo Luz Infinita, alumbre nuestra inteligencia, AMÉN.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, AMÉN

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