JUEVES 20-05-21
Jueves, 20 de mayo
LECCIONES PARA LA VIDA
Buenos días, nos vamos preparando para la oración...
En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Buenos días, Cristo reina.
Las madres son una de las personas más influyentes en la vida y de las que aprendemos más cosas, aunque no siempre nos damos cuenta. Y son las cosas más sencillas y cotidianas de las que más aprendemos. Son esas cosas las que nos marcarán en el futuro.
Lectura
#1 – Piensa en lo que has hecho
No fueron pocas
las veces que tuve que meterme en mi habitación por algo que había hecho. Puede
que entonces lo viera como un
castigo, pero el hecho de que mi madre me obligara a retirarme a solas,
quisiera o no, me hacía pensar en lo que había hecho y a entender las cosas.
A día de hoy, cuando veo que hay algo que he hecho mal -o que estoy a punto de hacer algo que no debo- me retiro a pensar sobre ello, en silencio.
#2 – Hazte respetar
Seguro que a todos, en alguna ocasión, nuestra madre nos ha dicho algo como esto: “Pero, ¿tú con quién te crees que estás hablando?” Porque hacerse respetar es fundamental para todo aquel que pretenda ser una buena persona.
#3 – Trata a los demás como quieres que te traten
#4 – Respeta a los mayores
Cuando somos jóvenes, pensamos que nos vamos a comer el mundo, que sabemos más que nadie. Pero hay cosas que solo se aprenden con el tiempo, que no están en los libros, ni se descubren haciendo prácticas ni experimentos, que duelen más que una mala calificación o la pérdida de ránking en un juego.
Los mayores nos pueden ofrecer orientación, apoyo, experiencia… Y respetarlos nos ayuda a crear cultura, a sentar las bases de ese respeto que, un día, demandaremos los demás.
#5 – Cuida tus modales
Aprender modales es algo que se hace en casa. Como persona, debes crear una cultura y una forma de hacer las cosas, igual que lo hace tu madre. Ella te ayuda a marcar los límites entre lo que es tolerable y lo que no, igual tienes que hacer tú cuando te toque.
«Jesús, viendo a su madre y junto a ella al discípulo a quien amaba, dice a su madre: «Mujer, ahí tienes a tu hijo.»
Luego dice al discípulo: «Ahí tienes a tu madre.»
Y desde aquella hora el discípulo
la acogió en su casa».
Oración
Por todo esto queremos rezar hoy y os pedimos que os unáis a nuestra oración con vuestra atención.
Hola María,
buenos días, en esta mañana de mayo. Ayúdanos a vivir atentos, como tú,
y aprender cada día algo nuevo
de las cosas que pasan a nuestro alrededor.
No dejes que nos perdamos en la
locura de este mundo
y ayúdanos a ver a Dios en los que están
a nuestro alrededor y enamorarnos de Él. AMÉN
Cristo vence, Cristo reina, Cristo impera, Cristo luz infinita, alumbre nuestra inteligencia. Amén.
En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
¡Que tengáis un buen día!